lunes, 4 de abril de 2016

IDENTIDAD DIGITAL

Siempre he sido cuidadosa sobre mi identidad en internet y, de momento, parece que consigo mantener mi imagen y vida personal a salvo. Resulta bastante difícil, porque en cualquier lugar que te registras te solicita datos que no te gustaría proporcionar, si no lo haces no podrás acceder a ciertas páginas. 
Aún así, es sencillo no proporcionar demasiadas indicaciones más allá de la fecha de nacimiento (obligatoria en muchos casos).
Al buscar mi nombre, algo que hago con cierta frecuencia, observo con incredulidad que la única que aparece no es otra que una ponencia sobro uso de las TIC en el aula, en Las Acacias, ¡y yo que tanto ocultaba mi imagen! Tengo Facebook, sin fotos, tengo Twitter, con avatar, canal de Youtube con vídeos educativos, estoy en algunas redes sociales profesionales, y mi única instantánea la ha proporcionado la Comunidad de Madrid.

Afortunadamente, el mayor número de ocurrencias en las búsquedas de Google siguen estando relacionadas con mi actividad académica. ¡Menos mal! Me ha salvado Bencimarte, gracias.